La gestión de RRHH en el proceso de internalización

  • Actualizado: 21 julio 2022
  • Publicado por primera vez: 12 noviembre 2013

gestion rrhh
Las principales características del entorno socio económico en el que conviven actualmente nuestras organizaciones son su dinamismo y globalidad. Nos encontramos  en entornos cambiantes,  con un grado de interdependencia entre ellos cada vez  mayores, políticas globalizadas, un incremento progresivo de los movimientos de internacionalización de  capitales, reducción de una demanda interna, etc…

Todo ello nos aboca a que miremos hacia el exterior. Pero, ¿nuestras organizaciones se encuentran preparadas para esos nuevos retos a los que nos tendremos que enfrentar? ¿Nuestros productos son adecuados para un mercado exterior?  ¿En qué mercados debemos de entrar? ¿Qué estrategia debemos de seguir? ¿Qué tipo de organización es la más adecuada para conseguir nuestros fines?

En estos momentos, un mayor número de organizaciones dan dicho paso como respuesta ante una bajada de la demanda local, o como medio de consolidación en el exterior gracias a una mayor competitividad frente al resto.

Realizar un proceso de internacionalización, no sólo lleva consigo un coste económico, sino que también afecta a nuestro principal recurso: la fuerza laboral. Para reducir dicho impacto y conseguir que ésta se convierta en una aliada fuerte frente al cambio que nos permita alcanzar nuestro fin, deberemos apoyarnos en nuestro departamento de RRHH (Recursos Humanos). Pero ¿qué nos puede facilitar en este proceso? ¿Cómo nos podemos apoyar en él?  ¿Cómo debe de intervenir en éste?

Por un lado, nos debemos de aprovechar de su conocimiento, para tomar una decisión deberemos contar con el máximo nivel de información. El departamento de RRHH nos puede facilitar su visión, lo que repercutirá en una dirección sólida que permitirá reducir los cambios que sólo llevan a la realización de parches que corrigen ciertas anomalías puntuales que puede/n o no converger en nuestra misión.

Nos debe descubrir el talento que mejor se adapte mediante promociones internas o procesos de selección. Una buena evaluación del personal nos permitirá ser más competitivos frente a las empresas de la competencia y adaptarnos de una forma rápida al entorno cambiante, facilitándonos la labor de incorporación a la organización del personal necesario en cada momento, garantizando una fuerza laboral que permite desarrollar a la organización su fin, mediante el cubrimiento de vacantes con personal que posibilite una orientación internacional.

Debe ser el nexo de unión que permita defender la cultura y valores de nuestra organización dentro de nuestro proceso de expansión internacional. Esto se conseguirá actuando como interlocutor entre ésta y los trabajadores desplazados. Todo esto nos llevará a que todas las personas dentro de la organización, independientemente de donde se encuentren, sigan la misma dirección y no se sientan desplazadas o aisladas.

Les corresponde satisfacer tanto los requerimientos internos como las perspectivas de los trabajadores desplazados llegando a un punto intermedio de acuerdo, el cual proveerá a la organización a cumplir su fin de la mejor manera posible sin llegar a provocar tensiones innecesarias que solo llevarán a un retraso o a impedir su correcto cumplimiento.

Y como último punto, sin menospreciarlo por la posición en la que se sitúa, el departamento de RRHH debe de facilitar procesos formativos continuados. Esto permitirá a la fuerza laboral adaptarse con mayor facilidad a los entornos cambiantes y mejorar nuestra competitividad frente al resto. Su objetivo es conseguir que nuestro personal se encuentre siempre un paso por delante de los mercados. La mejora en competitividad nos permitirá una mejor visión de nosotros dentro de los mercados.

 

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 Jose Ramón Lázaro
Equipo DATADEC