La economía circular supone un modelo económico que tiene por objetivo reducir el consumo y los desperdicios de recursos en los procesos de fabricación. Surge ante la necesidad vital de cambiar el modelo económico lineal que se ha estado practicado durante décadas, definido por la cultura de extraer materia prima, fabricar, utilizar y desechar, lo que supone un alto coste ambiental.
En el marco de la gestión de residuos, con la economía circular se optimizan los recursos y se valorizan los residuos al alargar su vida y proporcionarles una segunda oportunidad, para servir como un producto nuevo o como un producto renovado. Además, es un sistema indispensable para la buena gestión de los residuos urbanos.
Tabla de contenidos:
La economía circular puede definirse como un modelo económico y social, que tiene como objetivo garantizar la producción de bienes y servicios con el menor desperdicio de materia prima y energía, prestando especial interés en alargar el ciclo de vida de cada producto gestionándolo con el mayor respeto al medioambiente.
Se trata de un flujo circular en el que se toma en cuenta el residuo como un recurso que puede transformarse y tener nuevas oportunidades de uso. Cuando finaliza el período de uso de un producto, los materiales que los conforman se mantienen dentro del flujo económico y se transforman para ser útiles una y otra vez.
Se trata de un modelo que ayuda a una mayor sostenibilidad del producto a través de la introducción de nuevos conceptos como la reparación y el ecodiseño. Podemos decir que los residuos no son desechos, sino recursos que pueden tener nuevas vidas.
La economía circular supone un cambio del anterior modelo basado en las 3 R (Reducir, Reutilizar, Reciclar) a un nuevo modelo que trata de optimizar los procesos de producción y de consumo de bienes y servicios a través de las 7 R que son:
Los envases constituyen uno de los elementos que más impacto tienen sobre los residuos, ya que normalmente todos los productos que consumimos contienen algún tipo de envase. Por este motivo, rara impulsar la producción de envases sostenibles debe instaurarse el modelo de economía circular en donde se analice el ciclo de vida del envase.
Para esto, debe de considerarse el ecodiseño del producto y su reutilización o reintroducción a la fase de consumo como un nuevo producto. Todo esto debe plantearse desde una perspectiva respetuosa con el medioambiente, en pro de la transformación del residuo en un nuevo recurso o uso.
La industria del packaging constituye un factor clave dentro de la economía circular para conseguir disminuir la cantidad de residuos que se generan en el mundo, consiguiendo que muchos materiales que se utilizan para los envases y embalajes vuelvan a ser reutilizados.
Como se ha comentado anteriormente, los envases son uno de los elementos que mayor contaminación causan al medioambiente. En consecuencia, en el proceso de producción de los envases y embalajes es primordial:
El packaging diseñado a partir de un enfoque ecológico, o ecodiseño, aporta importantes ventajas, tanto en la prevención de residuos como en la optimización de su gestión. Por ejemplo, contribuye a:
Los envases cumplen una función fundamental en la comercialización de productos y en lograr la satisfacción del cliente.
Son los envases los que permiten la dosificación correcta y demandada por el consumidor y facilitan la manipulación, distribución, conservación y protección del producto. Además, son los envases los que sirven para mostrar la información primordial del producto, la información promocional de la marca y la información complementaria.
Dentro de este contexto, los envases se producen bajo el cumplimento de requisitos legales, requisitos tecnológicos, requisitos del consumidor y requisitos de la distribución y almacenamiento.
Pero es indispensable agregar un quinto requisito para la protección y respeto con el medioambiente. Y es en este punto en el que debe integrarse el ecodiseño enfocado en la prevención de residuos dentro de los Planes Empresariales de Prevención PEP, establecidos por las normativas que rigen la materia.
Básicamente, la prevención de residuos se centra en disminuir la generación de residuos o en reducir los efectos nocivos de éstos sobre el medioambiente. No obstante, el ecodiseño es la inclusión del factor ambiental dentro de la fase inicial de diseño, abarcando también la fase de uso y de gestión del residuo urbano que sucede después del consumo del producto.
Por lo tanto, el ecodiseño es clave tanto en la prevención de residuos como en la gestión de estos dentro del ámbito urbano. Entre las principales estrategias de ecodiseño en envases están:
La creación de una economía circular estable y próspera, que realmente beneficie al medioambiente, requiere de una verdadera transformación de los enfoques en los procesos de diseño y de la adecuación de ciertas estructuras en la cadena de producción.
Pero la economía circular va más allá. Este modelo depende de cómo se gestionan los recursos, de cómo se fabrica el producto y de cómo se usa, pero también de cómo se gestionan los residuos que se generan.
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