ELEMENTOS DEL MRP CRÍTICOS PARA COMPETIR

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Como hemos comentado en otros post, a partir de la visión y misión que tenga una compañía, es necesario que su estrategia les permita una viabilidad económica y financiera, sin la cual no se podría asegurar su permanencia en el actual escenario competitivo. Para ello la empresa debe fijarse unos objetivos cuyo cumplimiento requerirá el uso de recursos para alcanzar los resultados previstos.

El software MRP es una herramienta eficaz para gestionar y controlar una parte importante de la cuenta de resultados, en concreto todo lo relacionado con los recursos o gastos necesarios para alcanzar el nivel de actividad deseado. 

Para mejorar nuestro conocimiento de cómo nos puede ayudar un sistema de este tipo, debemos analizar qué elementos del MRP aportan un mayor valor para competir de forma eficaz.

Aunque, como hemos comentado anteriormente, un sistema MRP nos permite mejorar el control y la gestión de los recursos de la empresa, esto se consigue, por decirlo de una forma muy simplista, calculando las necesidades de los recursos necesarios para obtener las cantidades deseadas de productos o servicios que se requieren para mantener el nivel de actividad deseado.

De acuerdo con este concepto general, se nos plantean algunas preguntas que necesitamos contestar para poder identificar los elementos del MRP más importantes que determinen su capacidad funcional:

¿Cómo se relacionan los productos o servicios finales con los recursos?

¿De qué recursos hablamos?

¿Cómo se calculan las necesidades, tiene en cuenta las limitaciones de capacidad?

¿Cómo se relaciona con los procesos de gestión involucrados?

En la respuestas a estas preguntas vamos a encontrar los elementos del MRP que consideramos críticos para mejorar la capacidad de gestión y, por tanto, la posibilidad de  adaptarnos a los requerimientos competitivos.

• ¿Cómo se relacionan los productos o servicios finales con los recursos?

Respondiendo a esta pregunta, hay que decir que todos los software de MRP conocen la relación entre los outputs (productos finales) y sus inputs (recursos necesarios) a través de una estructura jerárquica que los relaciona para poder calcular las necesidades. Es habitual llamar a esta estructura como la lista de materiales (recordando la utilidad original por la que se creo esta herramienta) pero en realidad, supone una estructura mucho más evolucionada que nos permite operar con mayor número de parámetros.

Con relación a este aspecto, la diferencia que existen entre las diferentes soluciones que hay en el mercado podemos destacar:

• • La forma en la que se mantiene esta información (tanto la modificación como la actualización). Esto es de vital importancia, ya que la calidad de la información que se maneje es fundamental para que un sistema de planificación de recursos sea útil. A estos efectos, y para poder gestionar con eficacia la gran cantidad de datos que tienen estos sistemas, es necesario disponer de herramientas de actualización masiva que permitan gestionar la nueva información  a modificar de acuerdo a distintos criterios que se puedan aplicar de forma flexible. Esto sin duda alguna, nos afectará a las características competitivas que se focalicen en el factor tiempo y en la flexibilidad.
  • La cantidad y el tipo de datos que se contempla en cada nodo (elemento a controlar) del grafo que relaciona los distintos elementos. Esto tendrá un efecto directo sobre la siguiente cuestión, que analizaremos en el siguiente punto, relacionada con los recursos que se pueden controlar.  Esto sin duda alguna, nos afectará a las características competitivas que se focalicen en la capacidad de cálculo, flexibilidad y personalización

• ¿De qué recursos hablamos?

Al principio de los tiempos sólo se contemplaba la cantidad de recursos incorporados físicamente al producto final, por tanto, hablábamos de la cantidad en unidades físicas de materias primas y componentes.

Posteriormente, de acuerdo con nuevas necesidades, se amplió el alcance del análisis para incorporar las unidades monetarias (en sus distintas vertientes: real, estándar, etc..) y también, otros recursos involucrados directamente en la producción como son las horas de máquina, etc…

En la actualidad, para poder dar soporte a un mayor número de necesidades, podemos decir que el sistema debe estar preparado para incorporar cualquier tipo de recurso que tenga una repercusión directa o indirecta en los productos y servicios que comprendan la actividad de la empresa. En este sentido podemos destacar:

• • Los recursos incorporados en los productos o servicios finales como son: las materias primas, componentes, semielaborados, mercaderías, etc…
  • Los recursos necesarios para la producción propia como son: tiempo de las máquinas, tiempo de personal, materiales auxiliares de producción, etc…
  • Otros servicios que complementen la propuesta de valor de la compañía. Hay que tener en cuenta que en la mayoría de los casos no existe una relación directa entre este tipo de servicios y el producto o servicio final que se vende, por lo que se deben establecer parámetros adicionales que simulen su comportamiento de la realidad. A título de ejemplo podríamos hablar del transporte de venta, comisiones comerciales, etc…

Cuántos más recursos podamos gestionar, mejorarán las características competitivas basadas en la capacidad de análisis, flexibilidad y personalización.

• ¿Cómo se calculan las necesidades, tiene en cuenta las limitaciones de capacidad?

Existen dos elementos del MRP fundamentales para tratar esta cuestión:

• • Por una parte, el cálculo de necesidades teóricas en base a la disponibilidad real. Para ello es necesario tener la capacidad de relacionar y, por tanto de integrar, los recursos objeto de análisis con la situación de los mismos en los distintos procesos que los gestionan, de forma que se pueda calcular no sólo las necesidades absolutas, sino las necesidades relativas como consecuencia de tener en cuenta la situación de disponibilidad real de cada recurso (nivel de stock, política de almacén, pedidos pendientes de recibir, etc…)
  • Por otra parte, el cálculo de necesidades reales, es decir, teniendo en cuenta en el cálculo las limitaciones de capacidad y la disponibilidad actual.  Aunque era muy habitual hasta el momento que las empresas no basaran su gestión en el cálculo de necesidades teniendo en cuenta sus limitaciones de capacidad, debido principalmente a su complejidad (limites de capacidad productiva, capacidad de entrega de los proveedores, etc…), sin embargo, es cada vez más frecuente que las empresas necesiten tener en cuenta dichas limitaciones, ya que su omisión puede afectar muy negativamente a sus compromisos adquiridos y, por tanto, a su capacidad de satisfacer finalmente a sus clientes. Esta es una de las funcionalidades que más puede diferenciar las distintas soluciones que existen en el mercado.

En el caso de que el proceso de cálculo de necesidades MRP tenga en cuenta los factores de capacidad, deberemos tener en cuenta que pueden ir referidos a:

• • Las limitaciones de capacidad productiva propia (capacidad de máquinas, jornadas laborales, etc…)
  • Las limitaciones de capacidad productiva ajena.
  • Las limitaciones referidas a las condiciones de compra establecidas por los proveedores o acreedores relacionadas con su capacidad.

• ¿Cómo se relaciona con los procesos de gestión involucrados?

El cálculo de la necesidad de recursos se requiere para utilizarlo en distintos procesos empresariales. Dado el alto volumen de datos que requiere su cálculo, es deseable contar con algún tipo de utilidad que facilite su uso. Vamos a indicar aquellos elementos del MRP que nos pueden aportar mayor valor para el objetivo que perseguimos:

• • Integración con procesos operativos de gestión para facilitar:
    • La propuesta de ordenes internas de fabricación.
    • La propuesta de solicitud de compras a proveedores de materias primas y otros componentes.
    • Etc…

• • Integración con los procesos presupuestarios para facilitar su elaboración y control.
  • Otros análisis diversos basados en simulaciones, análisis de inversión, etc…

Cuanto mayor sea la integración con otros procesos de gestión, más mejorarán las características competitivas basadas en la capacidad tiempo, flexibilidad y personalización.

*Foto de Tecnología creado por aleksandarlittlewolf - www.freepik.es

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