QUÉ ES LA GESTIÓN DEL ALMACÉN 4.0

La gestión de almacén 4.0 no es más que el uso inteligente de las tecnologías mal llamadas inteligentes. No nos equivoquemos, la aportación de inteligencia todavía es un valor añadido de propiedad exclusiva del ser humano.

“Es el uso inteligente de la tecnología lo que hace que pueda llamarse inteligente”

Antes de esta revolución digital, antes de esta sociedad interconectada, era el cliente el que se desplazaba a por sus productos. Esta circunstancia inherente a la sociedad pre-ecommerce, a nivel logístico implicaba que, el picking lo realizaba el propio cliente empleando su tiempo y sin imputar coste alguno, si elegía un producto equivocado, lo asumía el cliente, la logística inversa iba a cargo del cliente, el transporte del producto lo realizaba el cliente, si durante ese traslado el producto sufría algún daño ese coste lo soportaba el cliente y si era necesario envolver o empaquetar el producto, esta acción también la realizaba el cliente.

Para la industria 4.0, para el almacén 4.0, el cambio social ha supuesto un cambio estructural enorme. Pasamos de tiendas (comercio local) ubicadas con lógica, cerca de sus consumidores o clientes (barrio) a centros de distribución de tamaño medio, muy automatizados situados en las afueras de grandes centros poblacionales. Con plazos de entrega leoninos, previsiones de la demanda muy potentes, un flujo tenso de mercancías, rotaciones muy elevadas y un alcance de distribución a varias zonas, distritos o barrios, se necesita un nuevo tipo de almacén, los llamados centros de microfulfillment.

Es del todo impensable que la gestión de un almacén tradicional satisfaga las necesidades de una sociedad que nada tiene que ver con la que estos almacenes atendieron en sus inicios.

“La gestión del almacén 4.0 se impone por decreto del mercado”

¿Pero en qué consiste exactamente esa gestión de un almacén 4.0? Pues pensemos que ya no hablamos de futuro, ni siquiera de futuro inmediato, hablamos de actualidad de la gestión de almacén.

El primer paso para la digitalización de los almacenes es su software SGA. Un software que debe estar preparado para conectarse a gran velocidad (5G) con la nube y extraer de ella ingentes cantidades de datos (Big Data) para procesarlos y computarlos en la nube junto con los datos procedentes de sus propias existencias (IoT) almacenadas o las que están por llegar. Almacenes con gran capacidad de aprendizaje (machine learning) capaces de anticiparse a las necesidades y demandas de sus clientes (AI).

Para comprenderlo mejor, debemos sumergirnos en las partes más importantes que ya están jugando un papel fundamental en la gestión de los almacenes 4.0 de mayor éxito, en pleno funcionamiento en nuestra sociedad.

El software de gestión de almacén, el sistema SGA

La gestión del almacén se inclina cada vez más a utilizar softwares como servicio (SAAS). Esta resultará ser la tendencia mayoritaria por pura lógica. La revolución en las comunicaciones digamos que, popularizará, el acceso al software. Un SGA como servicio (SAAS) ofrece múltiples ventajas con respecto al modelo “on premise” (como propiedad en nuestro servidor local).

Actualización inmediata. Las nuevas versiones se actualizan en tiempo real, no se necesita que un técnico vaya de empresa en empresa actualizando cada particularidad de cada software SGA.
Mejoras de servicio. Las tareas de mantenimiento o la gestión de incidencias son inmediatas y en remoto. Además, las incidencias relacionadas con fallos en nuestros equipos se reducen ostensiblemente ya que todos utilizan equipos avanzados del data center del proveedor que suministra el servicio.
Mayor seguridad. Los data center donde residen estos softwares SGA, cuentan con equipos mucho más sofisticados en todos los sentidos, incluidos en sistemas de seguridad, que la mayoría de las empresas en local. Esto proporciona un plus de seguridad para la privacidad de nuestros datos.
Menores costes de implantación. Dado que contratamos un servicio y no necesitamos instalaciones de complejos equipos informáticos, que además deben mantenerse refrigerados, los costes de implantación se reducen de forma notable.
Igualdad de software. Una gran multinacional puede utilizar el mismo software con las mismas prestaciones que una droguería local o que una pyme de distribución de fontanería. Aunque esto, depende de la política comercial particular de cada partner, hoy en día existen proveedores que practican abiertamente esta filosofía realmente ventajosa.

“Una parte importante de las diferencias y ventajas competitivas siempre estarán en el uso que le damos al software SGA y a la organización de nuestro almacén”

El triángulo que revolucionará el mundo industrial: 5G, IoT y Big Data.

No es que sean tecnologías que tengan una relación directa con la gestión de almacén, pero dado que cambiarán por completo el escenario de la industria tal y como lo conocemos hoy, es inevitable pensar que revolucionarán el funcionamiento del almacén 4.0.

Conectados a través de 5G, es decir, a la misma velocidad y eficiencia que si estuviesen conectados por cable, auténticos enjambres de productos inteligentes y equipados con IoT, es decir, con sensores o pequeños procesadores interconectados entre sí, con la nube y con pequeños centros de cómputo local, tomarán ciertas decisiones como la de enviar información que resulte de interés a sus gestores.

Hoy, dependemos de las personas y del grado de confianza que inspiran para multitud de decisiones industriales. Sin embargo, en el mundo del IoT, el Big Data y el 5G, no necesitaremos hablar con nadie para saber si un lote procedente de oriente ha roto la cadena de frío. Los componentes del producto terminado que hemos comprado nos informarán de si ya han sido ensamblados en el producto final, que a su vez nos informará de su plazo de entrega exacto, desde su ubicación concreta en el almacén del proveedor o desde el remolque del transporte. Un producto dañado o caducado se auto rechazará por motivos de calidad y podrá gestionar su reemplazo o su propio scrap, informando incluso a las autoridades competentes impidiendo así daños al medioambiente por imprudencias.

La inmediatez en la recopilación, tránsito y cómputo de la información es lo que está cambiando nuestro mundo, para un almacén 4.0 será impensable funcionar sin información recopilada directamente del producto.

Machine learning (AI – inteligencia artificial).

De la misma forma que una determinada aplicación aprende a mostrarnos información comercial relevante acerca de los temas que nos interesan, deduciéndolo de las visitas que realizamos y del uso que hacemos de otras aplicaciones, la AI puede utilizarse para que los softwares SGA aprendan con el paso del tiempo qué acciones nos interesa realizar, según las circunstancias que el software sea capaz de controlar. Y podrá llegar a controlar muchas.

Hoy día ya no es descabellado pensar que a medio plazo un SGA podrá recalcular la carga de trabajo y la secuencia de tareas en base, por ejemplo, a la previsión meteorológica. Si la previsión del tiempo anuncia lluvias y eso significa repartos más lentos, el SGA utilizando algoritmos de inteligencia artificial apoyados por el Big Data y basándose en experiencias anteriores, quizá sea capaz de adelantar o retrasar operaciones para que la carga se realice antes que en un día de previsión soleada. Al tiempo la aplicación que calcula las rutas también reaccionará calculando rutas que eviten los atascos o las zonas y horas de mayor densidad de tráfico con lluvia, como por ejemplo las zonas cercanas a los colegios.

Lo más increíble es que, organizar el trabajo en un almacén en base a un criterio meteorológico es demasiado sencillo. El machine learning puede ir mucho más allá, podrá tener en cuenta muchísimos más factores de decisión además del meteorológico como las zonas geográficas, períodos vacacionales, probabilidad de padecer enfermedades, lesiones o golpes de calor, posibilidad de averías, mantenimientos de maquinaria o los tiempos que cada operario tarda en mover ciertas tipologías de mercancías, y no obtendrá los mismos resultados para un almacén de distribución de piezas electrónicas, que para un almacén de productos cosméticos o de suministro de materia prima.

Conclusiones

La gestión del almacén 4.0 debe atender a las necesidades de la sociedad 4.0 y responder a los requerimientos de la industria 4.0.

Como siempre, esto es mucho más fácil de decir que de cumplir. La sociedad digital interconectada está acostumbrada a obtener cualquier producto imaginable, con un clic de su pulgar, desde cualquier punto del planeta y lo desea en un plazo máximo de 24 horas y bajando.

Resultará imposible complacer las necesidades de este nuevo modelo social sin el uso adecuado de la tecnología. Tecnología como el Big Data o análisis de datos de múltiples fuentes, es decir, ingentes cantidades de datos de increíble complejidad y gran variabilidad y capacidad de crecimiento. Datos estructurados (como los de nuestro ERP) y no estructurados (como los disponibles en Internet) cuya computación y análisis requiere de softwares especializados y computación en la nube.

Las interconexiones entre productos, máquinas, procesos, clientes, productores y proveedores se acelerarán de forma exponencial y, por tanto, sus interrelaciones cambiarán, llegando a un escenario de eficiencia y productividad nunca vistos.

Pero no nos equivoquemos, la acepción de “inteligente” que se aplica con demasiada generosidad a cualquier gestión tecnológica o a cualquier producto que incorpore tecnología de última generación, sigue siendo una particularidad del usuario, es decir, del ser humano que la gestiona. La gestión del almacén 4.0 es una gestión tecnológica al servicio del ser humano y sus necesidades.

Es el usuario el que confiere atributos a la gestión 4.0, sean bondades o desaciertos, y nunca al revés. Al menos todavía no.